Igual que las viviendas construidas en hormigón, las edificaciones de acero o en Steel Frame destacan por su excepcional resistencia.
Como beneficio adicional, debido a su ligereza y flexibilidad inherente al material mismo, las construcciones de acero se benefician de un proceso de edificación más rápido y sencillo.
Gracias a estas características, no es necesario utilizar maquinaria pesada para su transporte o montaje, lo que resulta en una reducción significativa de los costos finales. Además, dado que el acero es un material altamente maleable y fácil de trabajar, como mencionamos, brinda numerosas oportunidades para la personalización.
La construcción de viviendas con este material genera una cantidad mínima de residuos, por lo que, aunque no alcanza el nivel de ecología de la madera, cumple en cierta medida con los principios de sostenibilidad. Sin embargo, el acero es un conductor eficiente de calor, lo que puede requerir medidas adicionales de aislamiento para mantener una temperatura interior óptima.
Fotografías: Marmol Radziner Architecture