Desde fuera cualquiera diría que es una casa modular. Este modelo en concreto, el modelo Chipiona, cuenta con 75 metros cuadrados, tres habitaciones, dos cuartos de baños y un espacio en el que conviven la cocina, el salón y el comedor. Todas las estancias cuentan con grandes ventanas hacia el exterior y la fachada, una fachada ventilada que contribuye a un mejor aislamiento térmico y acústico, se compone de paneles de color claro mezclados con varias superficies que nos recuerdan a las antiguas paredes de piedra. ¿Queréis conocer los interiores?

La distribución de las estancias se hace a lo largo de un eje longitudinal que empieza en esta zona común, donde encontramos la cocina, el comedor y el salón. Cada una de ellas está completamente abierta, de tal forma que no se pierde espacio con particiones innecesarias ni con pasillos.

La distribución de los muebles es la que define los límites de cada zona.

La cocina conforma todo el frente de este espacio común. Una pared completa, de suelo a techo, se cubre con muebles blancos sin tiradores que disponen de suficiente espacio de almacenaje. La encimera, de silestone blanco,  configura una amplia zona de trabajo que llama la atención sobre el resto de superficies gracias al revestimiento de su pared de azulejos.

Para no recargar el espacio y facilitar el flujo de luz y de reflejos, la mesa de comedor tiene un diseño sencillo de madera y cristal.

Para investigar un poco más sobre otros diseños de mesas de comedor, os hemos traído el siguiente libro de ideas: ’Para el comedor, ¿mesas redondas o rectangulares?’

Como indicábamos al principio, la casa cuenta con tres habitaciones. Dos de ellas de 11 metros cuadrados aproximadamente y otra de 6 metros cuadrados. En la fotografía, vemos una de las dos más grandes, usada como dormitorio. En ella, las paredes de color crema y el suelo de madera aportan una atmósfera muy relajante e idónea para el descanso. La cama volada de madera maciza de teca ha sido elegida también por los propios diseñadores.